viernes, 15 de febrero de 2008

PERFIL: IDALIA VARGAS MARTINEZ, NICARAGUA.

POR: FRANCISCO ALTAMIRANO, NICARAGUA.
Idalia, al igual que el resto del contingente de 1984, llegó bajo la terrible ventisca del otoño más frío registrado durante la década de los ochentas. Para la época era delgada, ojos café oscuros, cabellera negra y casi lisa, cejas arqueadas e interrogantes, labios delgados, dientes pequeños y regulares. De conversación fácil, agradable y amena. Incisiva a la hora de poner los puntos sobre las ies.

Casi de inmediato se integró a la Banda Tasba Pri. Hay que decirlo con toda franqueza: nadie le hizo mate a la recién llegada porque era dueña de su propio carácter. Digamos que combinó a la vez firmeza y dulzura. Ambas estrategias, en adelante, determinaron la larga y fructífera relación entre Idalia y el resto de la Banda. Antiguamente, los hombres predominaban en la Banda, así que Ella le dio el toque delicado al planteamiento original del grupo. Idalia, entonces, se convirtió en una suerte de niña mimada y de mascota del grupo. Mauricio, Samuel, Daniel, Cheyito, Jirafita, El Poeta, Hiparlo y Di Tayguer, la respetábamos.

La descripción anterior estaría incompleta si no se le agrega el condimento esencial a la sopa: Idalia era la persona más disciplinada de la Banda. Demasiada constante, --como dice el chele Juan José. Una mujer independiente, inteligente y, sobre todo, presta a escuchar las sugerencias de La Gueba, durante los ensayos. Idalia estuvo durante las épocas más brillantes de la Banda, pero también asistió a su ocaso. Era común que Idalia, después de sus obligaciones como estudiante de Economía Política en el Carlos Marx, asistiera puntualmente a los ensayos y a los compromisos con las demás organizaciones políticas y gremiales que tenía la Banda.

Así que estuvo en los Festivales Víctor Jara, en los toques con las organizaciones juveniles radicadas en la Maika, con entidades del Estado y de Gobierno, en fin, con todos las representaciones vinculadas a la vida nacional. En ese andar, Idalia se creció. Como primera voz femenina de la Banda, interpretó muchos textos y canciones relacionadas al amor, desamor, encuentros, desencuentros, la patria, la lucha revolucionaria, en fin, sobre los temas más vitales de la lucha de Nuestra América y, en particular, con los temas vinculados a la Nicaragua de los ochenta. Escuchamos a Idalia, a tantos años de distancia, cantar con mucha dulzura y sentimiento “un ruido de pájaros, predijo tu muerte...”. Queda la impronta de su voz, de su carácter, de su disciplina. Cuánto extrañamos a Idalia!.

1 comentario:

  1. Hola ! tuv ele placer de conocer a Idalia y cuanto me gustaria saber como poder ubicarla !, fue conmigo una gran persona y amiga si algunos de ustedes sabe como poder contactarla les agradecia tantissimo ....

    Urzulina Maldonado

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